2008/11/11

On/Off (#09)


Tráfico ilegal de mariposas. Mariposas bolivianas pinchadas sobre un tablero, secas, sin poder moverse, sin ser lo que habían llegado a ser. Como él. Las comidas, las partidas de mus después de comer, los partidos de fútbol, las clases de teatro… No, lo peor de todo era sentirse solo. Por la noche dar vueltas y más vueltas, en la cama y dentro de su cabeza.

El Gran Markus Fernández, ¿no lo conoces? Todo el mundo ha oído hablar de él. Siempre va así, con su sombrero, con la cabeza bien alta. Todo el mundo le mira, le mira, le vuelve a mirar y piensa, ¡Pero si es el Gran Markus! Importante, respetado, conocido en todo establecimiento que se precie, siempre rodeado de personajes influyentes, siempre con hermosas señoritas… Así era. Así fui: el Gran Idiota Fernández. Por lo menos dejé la gabardina y los zapatos y me volveré a colocar vaqueros y zapatillas como cuando era un mediocre. Un mediocre que estaba fuera. ¿Y ahora qué voy a hacer? ¿Qué voy a hacer aquí dentro?

Aquella noche había niebla. Había quedado con el Gran-Bibendum para tratar un nuevo asunto. No le había vuelto a ver. Por lo visto, nunca apareció, debió de ir con sus soplones a tomarse unas copas mientras celebraban que habían cazado al incauto de Markus. Pobre muchacho, hacía un buen trabajo, diría Meandro; ahora sí que hará un buen trabajo cargando con el muerto, dirían sus marionetas; nunca mejor dicho, diría el gran él. O cualquier cosa parecida.

- Hola, Markus…
- Hola.
- ¿Qué has hecho contigo?
- Da igual. No te preocupes. Siempre he sido una mierda. Un poco más de mierda no pesa. Además, ya era una mierda antes de que te marcharas. Supongo que por eso desapareciste.

No hay comentarios: